HUECO. – Los retenes viales confirman  ¡El año de Hidalgo! Elimina la última posibilidad de que esta administración pública municipal de Parral fuera diferente a las, anteriores. La esperanza, si aún estaba viva, se esfumo por la coladera. Las mentiras, el autoritarismo y los negocios han pervertido un proyecto que en la teoría –campaña- iba más allá de los partidos. Se ha convertido en un Frankenstein, en una de las peores pesadillas administrativas que hayan padecido los habitantes de esta tierra.

RECUERDO. - El principal impulsor de Alfredo Lozoya para llegar a la alcaldía fue tanto el PRI como el PAN. El espejismo de que con sus propios méritos logro ganar una elección se desvaneció desde el primer momento.

AUXILIO. - En la primera gestión que duro dos años, el PRI con sus malas acciones de gobierno se hizo de un mal nombre, sin embargo, el capital político negativo, en la época de Duarte también era aprovechado imponiendo candidatos de oposición o hasta independientes. Del lado del PRI se contribuía con un candidato débil y entregado a perder.

ESPERANZA. -Los mismos priistas decepcionados fueron quienes entregaron sus estrategias y sus votos inducidos a la nueva propuesta de que derribaría al tricolor. El propio presidente priista Miguel Jurado fue el encargado de abrirle las puertas de la estructura que a él lo había llevado al poder, sin saber que estaría con ello cavando su propia tumba política.

PERDIDA. - En la reelección el aval fue tanto acción nacional como el PRI. Los panistas vendieron su alma al independiente, desde palacio de gobierno estatal vino la castración de la candidatura a la alcaldía, por primera vez en su historia el partido azul, no solamente no presentaba oferta al electorado, además era cómplice de quien arribaría al poder.

PRI. -Mientras que el PRI postulo un candidato que no prendió, echado para adelante animado por las diferencias que mantenía con Lozoya, José Luis fue manejado por una de las incondicionales operadoras Duartistas que lo sigue siendo del hasta ahora independiente, la debacle estaba cantada desde ese momento.

TIEMPOS. - Las condiciones van marcando el compás de la política que teje la reelección desde el mismo poder. El presidente se convierte en un caime bien, con medidas populistas y hasta acciones certeras. Al final termina igual que todos, con el clásico año de Hidalgo y convertido en un vil tirano.

ADMINISTRACION. - Aun y cuando la administración independiente que encabeza Alfredo Lozoya pintaba para más, termino en lo mismo o peor.

MENTIRAS. - Desde el inicio de su primer periodo de trabajo, que fue de dos años, tuvo la mira enfilada a la reelección. En el afán de pretender llegar con buenos números hizo de todo, hasta contar mentiras; cambio el sentido de circulación del Boulevard y aseguro que se había hecho un estudio de vialidad en el extranjero, cuando en la realidad fue una ocurrencia dominical que auspiciaría el boyante negocio de la constructora única del municipio.

INICIO. - Aquello fue solo el inicio; el acaparamiento de la obra pública ha ido de lo disimulado a lo burdo. Al más puro eslogan de Cesar Duarte, él es el dueño de la tiendita y determina el quien y cuánto.

RECURSOS. - Luego vendría el descobije de la sindicatura donde muestran la estructura ósea del famoso cajón al que no le meten la mano. Contratos simulados, donde no existe contra prestación de nada a cambio de jugosos pagos para sus cercanos, además de asignación de fabulosas compras a prestanombres con relación laboral de sus hermanos.

DECADENCIA. - Los afanes de figurar para trascender más allá de las fronteras de Parral son incesantes, con posicionamientos que no terminan de convencer en el resto de la entidad, los gastos en comunicación social se han incrementado a tal grado que son los más altos de la historia de nuestras arcas municipales. De esos deshonrosos primeros lugares solo habla el síndico.

DEFERENCIA. - La consigna del auto elogio y el culto a la personalidad por sobre la institución está a toda prueba y cuesta varios millones de pesos a los parralenses.

CONTRA. - La fachada del proyecto independiente se está cayendo a pedazos. Están dejando de lado a los sin partido, para refugiarse en eso que tanto odiaron y denostaron en su campaña; las instituciones políticas que es a donde se dirigen ahora.

RETENES. - Mención aparte merecen las acciones de los retenes. El presidente municipal Lozoya Santillán, al inicio de su administración se oponía y criticaba los retenes policiacos, los que consideraba un robo y un saqueo a la población.