Erick Jurado Monzon

Este domingo habrá elecciones en seis Estados, este evento marcará un paragón importante para las futuras especulaciones políticas. Pues lo que se prepara aquí es el terreno para la grande.

Existen dos bloques en pugna; el conservador y el de la alianza. El grupo conservador está constituido por el partido en el poder; Morena, y sus aliados. Mientras que la alianza es el grupo de unidad que se ha organizado para prevenir una completa hegemonía del partido que se nutre de todas las fuerzas y que sin duda tiene una visión muy asimilada sobre el ejercicio del poder en México.

Frente a este escenario, los partidos de la alianza intentaran conservar los Estados en pugna, pues sin duda los necesitan para mantener una postura de oposición fuerte para el 24, si se pierden por lo menos dos de los seis Estados la contienda será muy complicada una posible transición de partidos y un equilibrio de fuerzas.

En este ejercicio democrático, habrá dos visiones en competencia, pero también dos posibles escenarios que deben ser valorados por los electores. Por una parte, quienes están en el poder sostienen que se ha generado un cambio importante en la dinámica del país, lo oposición han denunciado de manera sostenida un retroceso dañino en el país.

En una elección se debe ponderar la visión de país, pero también se debe ponderar los productos sociales de la democracia y sus componentes. ¿A qué me refiero con ello? Un elemento importante que debe considerarse son los contra pesos, no hay democracia donde hay unidad.  En esta elección está en peligro la solidez de la oposición, misma que en cualquier sistema democrático debe existir, no hay democracias ahí donde no hay diferentes grupos.

Los electores deben sopesar también al sistema. No es prudente regresar a un sistema en el que un solo partido tenga el dominio de todo el territorio, a ninguna de las partes conviene. Creo que los partidos de oposición deben hacer su trabajo, pero el elector debe ponderar cual es la realidad próxima del país, pero también del sistema democrático, pues no hay pero error que cargar la balanza a un solo lado.

Al mismo tiempo que escribo estas líneas, entiendo también que mi solicitud está fuera de lugar y dirigida a un segmento muy selecto de la población, pues nadie me dejará mentir, y la política ha lucrado con la ignorancia y el desinterés, los partidos no han formado ciudadanía y ni la educación pública o privada, entonces estamos sujetos a un ejercicio de operaciones políticas, acarreos y compras, y en el fondo sabemos que eso no está bien y necesitamos cambiarlo, entonces cualquiera que sea el escenario en esta elección, tenemos la tarea clara, construir ciudadanía.  Pues no hay más equilibrio al poder que una ciudadanía bien plantada en el suelo.