¿Partió a Ítaca?
8 de diciembre de 2020

Erik Jurado
Regidor del ayuntamiento en Hgo. del Parral

La odisea, una de las epopeyas más gloriosas de la humanidad, atribuida a Homero, narra la partida de Ulises luego de la guerra de Troya hacia su casa en la isla de Ítaca. En el transcurso a su hogar Ulises enfrenta los más abominables monstruos y retos, que no solamente vulven su travesía heroica, sino una transformación del Alma.
Así como el glorioso Ulises nuestro radiante presidente Caballo, ha emprendido la más gloriosa de todas las batallas, la más grande y madre de ellas, al menos así lo propone en su publicidad ¿Irá el caballo a Ítaca? Personalmente creo que la respuesta es; no.
Más bien creo que el caballo inicio la conversión a lo que siempre ha sido y en el discurso criticaba. Lozoya será lo que siempre soñó y en sus discursos negaba y atacaba; un cacique de partidos.
Sólo sus más allegados podrán pensar que tienen oportunidad de llegar a la silla de gobernador, esto porque les conviene implantar muchos puntos ciegos a fin de observar un atractivo oasis en el más árido de los desiertos.
Su posición en la estructura de gobierno dependerá de varios factores y la moneda está en el aire, ya veremos que sucede, lo que ya queda claro es que Alfredo Lozoya siempre mintió a la gente, pero quienes pudimos ver su escencia y proceder quedamos en la posición de la razón. Lo que al caballo importa es el poder a toda costa, no hay lucha ideológica ni justicia en sus acciones, no existe un deseo espiritual, sino sólo los muchos objetivos materiales y pecuniarios.
Ahora el caballo se ha posicionado como un cacique de partidos al comprar el suyo propio y esperar maniobrar como lo hacen otros tantos ejemplos en el Estado y el país. Lozoya compró los derechos de Movimiento Ciudadano, un partido político que intenta hacerse parecer como una organización ciudadana, pues su nombre así lo apunta, pero tan partido como cualquier otro.
La maniobra ya inició; colocó a su incondicional prosélito Paco Sánchez a la cabeza para asegurar lealtad y resguardar los premios plurinominales como las negocias de posiciones y negocios que se encierran en las posiciones estatales. Luego migró a sus regidores que nada aportan pero todo obedecen hacia una militancia casi espuria, pues algunos de ellos le quedaron a deber todo a sus partidos de origen.
Ahora el caballo estará a la espera de vender sus votitos al mejor postor subirle la mano a Madero (Ya rezan por que sea el candidato del PAN) o a alguno otro que colabore en sus deseos y esté dispuesto a sumar al gobierno a ese proyecto que siempre se presumió independiente, pero siempre fue no menos que demagogia.
Por mi parte me despido de esa figura que se llama caballo y lo dejo cabalgar en otros niveles, le digo adiós de Parral a esa figura que vino a generar solo un espectro de algo que nunca fue; se va en plena pandemia, sin haber atendido el problema de salud y económico de fondo, se va dejando todas sus inversiones encargadas a algún otro títere. Estará presente porque sus negocios en la basura, luminarias, pavimento, así como todos los terrenos adquiridos no podrán ser descuidados, pero su corazoncito está ya en la búsqueda de horizontes más altos, y su amor por Parral duró lo que duró el poder aquí.
Adiós caballo, a cabalgar a otro lugar y a relinchar en otro sitio.


La Expresión Continúa...

