La señora que apenas puede caminar con bastón en mano, destacó que ya no haya como hacerle para cruzar por el lugar, pues el temor de caminar por el pequeño puente que dejaron para comunicar a la colonia El Potrero con El Barrio Topo Chico, es inseguro y aún más para una persona de edad mayor.

“Hay vengo, con mucho valor y esfuerzo desde mi casa (En el Topo Chico) a surtir mi despensa, pero al llegar a las obras, me entra una inquietud de saber que debo cruzar ese puentucho y hasta en ocasiones me arrepiento de venir” dijo con voz agitada.

En el lugar, automovilistas y motociclistas han optado por omitir las labores de construcción y arriesgarse a un accidente con tal de no rodear hasta la colonia Morelos para poder acceder a la vialidad del rio.

Es por ello que se aventuran a cruzar por el lugar, pese a que hay montones de tierra evitando el cruce, como símbolo de advertencia para los automovilistas, pero, aun así, prefieren circular por el lugar, arriesgándose a dañar su vehículo o tener un accidente.

La noticia de que, hasta el mes de septiembre, el avance de la obra era de apenas un 50 por ciento, no hizo más que causar inconformidad entre los vecinos, quienes no ven la luz al final del túnel y pues, como dicen por ahí, “Te aclimatas o te aclichi…”.

“Ni modo, habrá que esperar a que venga el Cuaco a que corte el listón e inaugure la obra, se pare el cuello y que de una vez ponga fin a este lugar, el cual, para empezar no sabemos ni porque empezó a modificarlo, si como estaba antes, nos hacía bien, ni accidentes había” señaló aquel sabio hombre de aspecto cansado y que según dijo en toda su vida, ha visto el pasar de muchos presidentes que lo único que quieren es “Justificar gastos”