Un pase de anotación de una yarda de Matthew Stafford a Cooper Kupp con 1:29 por jugar en el último cuarto, permitió que Carneros de Los Angeles obtuviera su segundo título de la NFL, tras vencer 23-20 a Bengalíes de Cincinnati en el Súper Bowl LVI.

Stafford, quien llegó esta temporada a Carneros, lanzó tres pases de anotación y fue el baluarte para el segundo título de Carneros como franquicia, pero el primero jugando como locales en Los Angeles.

La defensiva de Carneros también cumplió una parte importante para el triunfo sobre Cincinnati, al acumular siete detenciones contra Joe Burrow, el quarterback de Bengalíes.

Carneros cumplió con los pronósticos que le daban como favorito, pero debió sobreponerse a una desventaja de tres puntos hasta los dos minutos finales del último cuarto.

Fue ahí que Stafford hilvanó una marcha de 16 jugadas y 79 yardas de avance, suficientes para llegar al touchdown que les dio el triunfo.

Por su parte, Cincinnati sufrió su tercera derrota en el Super Bowl, pese a que llegó a este partido con la etiqueta de equipo Cenicienta.

El trofeo al jugador más valioso se lo entregaron al receptor abierto Cooper Kupp, quien fue pieza clave para el campeonato, ya que en dicho duelo obtuvo dos anotaciones, gracias a los pases de su mariscal de campo Matthew Stafford.

El elemento de 34 años no dejó de lado el reconocimiento y dedicó emotivas palabras a su equipo de trabajo, amigos, familiares y todo aquél que nunca dudó de sus capacidades dentro del terreno de juego.

“La verdad no sé qué decir. Estoy muy emocionado por el trofeo que acabamos de conseguir”, siguió. “Fue un partido muy complicado, pero salimos adelante. Agradezco a mi familia, amigos y cuerpo de trabajo por la confianza”, declaró el MVP del Super Bowl LVI.