Lo que no se dice...
24 de diciembre de 2025


TREGUA. - La llamada tregua de Navidad suele convertirse, cada año, en una pausa obligada para la política. Un momento en el que, ya sea por convicción genuina o por interés calculado, los entes de gobierno regresan a su origen: el sentido social de la administración pública, ese que muchas veces se extravía entre agendas, disputas y aspiraciones personales.
CERCANIA. - En los días previos a esta fecha se han registrado manifestaciones interesantes que no solo han involucrado a quienes hoy ostentan el poder, sino también a aquellos que aspiran a ocuparlo. Reuniones, acercamientos e intercambios de opiniones que, aunque no están exentos de cálculo político, representan una oportunidad para bajar la intensidad de las hostilidades y, al menos por un momento, voltear la mirada hacia quienes menos tienen.
ACTORES. - Así tenemos que hasta lo impensable hace unos años ocurre no solo en la política, también en la celebración; los actores de los antagónicos PRI y PAN, pudieron compartir festividades y enviar discursos cada uno en sus respectivas fiestas.
CERCANIA. - Incluso en la reunión que se dio entre los priistas y el alcalde Salvador Calderón, quienes hicieron una tregua en sus diferencias fueron la propia sindica Dalila Villalobos y el alcalde quienes mantuvieron la cortesía del protocolo, es decir el alcalde fue a la casa politica de la sindica con quien mantiene diferencias en posturas, pero se saludaron como si nunca hubieran discutido, con el resto de actores fue la misma, aunque con ellos las diferencias han sido menos estridentes.
ACCION. - Por cierto, que en ese contexto navideño se inscribe también la actuación de la administración de Salvador “Chava” Calderón en Parral. Más allá de la insuficiencia presupuestal que ha marcado su gestión limitando inversiones deseables y generando rezagos con proveedores finalmente le alcanzó para entregar dos mil cenas navideñas, una acción que implica no solo recursos, sino un importante reto de logística, coordinación y trabajo operativo.
CONDICION. - El dato no es menor. En tiempos donde los números no alcanzan y cada peso se discute, optar por una acción de carácter social marca una prioridad definida, aunque pudiera ser interpretado a simple vista como un gesto coyuntural, la historia es diferente.
NUEVO. - Sin embargo, hay un elemento que matiza la lectura política: esta actividad no es nueva para Calderón ni para su equipo. La entrega de cenas navideñas se ha realizado desde antes de que fuera alcalde, formando parte incluso de una práctica arraigada en su entorno familiar y financiada por un grupo de empresarios, que en aquellos momentos entregaban pollos rostizados para la cena.
LIGA. - Aquí es donde la línea entre lo político y lo personal se vuelve difusa. ¿Es estrategia? Probablemente. ¿Es convicción? También. En política, ambas cosas suelen convivir. Lo relevante es que, en medio del ruido, la confrontación y las carencias presupuestales, la tregua navideña permitió recuperar, aunque sea por unos días, el rostro humano del poder.
TIEMPOS. - Aunque la verdadera prueba vendrá después, cuando pase la temporada, regresen las presiones y se reactive la lucha política. Ahí será donde se verá si el sentido social fue solo una pausa decembrina o si logra mantenerse como una constante en el ejercicio del gobierno, lo más seguro es que solo sea una tregua temporal. Por ahora, la Navidad cumplió su función: recordar que gobernar también es servir, incluso cuando el margen de maniobra es estrecho.

Desde la Rumorosa…
TREGUA II.- Quienes hacemos las columnas de análisis político y social del portal expresión libre Parral, les deseamos a nuestros lectores que tengan una muy feliz navidad y un año 2026 lleno de bendiciones, trabajo y progreso personal, insumos indispensables en la tarea de la reconstrucción social. Nosotros haremos una tregua en las entregas y continuaremos, si el creador a si lo permite, en los primeros días del próximo año. ¡Hasta entonces!








