ESCANDALO. – El nuevo escándalo mediático de la fracción naranja en el cabildo de ¿la capital de lo bueno?, está en ciernes, no se trata de la ¡verdad de la salida de Lucio Porras de seguridad publica!, esa es otra, pero sí de los escritos que regidores de oposición hicieron llegar al congreso del estado a manera de denuncia ante la tolerada coacción del voto que ejerce Movimiento Ciudadano para con la regidora Aurelia Reyes Rubí, representante de los pueblos indígenas.

MANO. - El 2022 no enterró del todo los agravios y abusos que se dieron en cabildo, algunas anécdotas o excesos están a punto de retomar el ruido mediático que promueve con toda intención la oposición.

IMPUNE. - El recuerdo grotesco y abusivo de una mujer blanca sometiendo a una mujer morena en el seno del cabildo municipal ha quedado grabada, la depredación política se genera entre las iguales de partido, ambas comparten el color naranja por dentro.

LEGION. - Cecilia Arvizu, en aquella sesión del 22 de diciembre, cuando la oposición pretendía citar a comparecer a Otilia Torresdey, vio como su compañera de enseguida, a la que posiblemente le habían pedido cuidar, levantaba la mano para avalar que acudiera ante los regidores la titular de vinculación educativa, jugando con ello las contras a su equipo.

BORRON. - En ese momento, la reacción de la ex coordinadora de la bancada naranja, fue impulsar su mano para bajar de golpe el brazo levantado de Aurelia Reyes Rubí. El voto ya contaba, si se asume el criterio de anteriores ocasiones similares, pero en esta, quizá por la época navideña o porque simplemente nadie va contra su propio interés, el secretario Alberto Tarín fue complaciente y no contabilizó el voto, fingió no verlo, aunque en otras ocasiones había reconvenido a otros ediles, ante el cambio de sentido de su voto y aduciendo aquello de ¡no se aceptan recules! Les señala; ¡usted ya manifestó su voluntad! Sin dar con ello oportunidad de enmendar, pero, ¡ese día fue diferente!

UNIDAS. - Ante ello, la legión de regidores de oposición, decidieron desplegar la estrategia de ¡la piedra en el zapato naranja” y ni tardos ni perezosos fueron a poner en conocimiento del congreso del estado los abusos que se siguen cometiendo en el seno del cabildo.

DENUNCIA. - Otra queja más por los abusos en el cabildo de Parral fue recibido en las oficinas del congreso, pero ahora quienes promueven la queja no son directamente los agraviados, se aventaron a sudar una calentura ajena, con la intención de medir si pega.

OFICIOS. - Al menos tres comisiones de diputados locales atienden el caso de Aurelia Reyes. Los oficios fueron direccionados, el primero de ellos para la diputada priista Ivonne Salazar de igualdad de género.

SEMILLA. - Pero también sembraron la misma denuncia para la comisión de derechos humanos, la que preside Gustavo de la Rosa, el controversial morenista.

TRES. - Finalmente llegaron hasta los terrenos azules, con la panista Roció Guadalupe Sarmiento Rufino que es la titular de la comisión de pueblos indígenas, por cierto, la legisladora perteneció a Movimiento Ciudadano, de donde tuvo que salir huyendo desde la legislatura pasada ante los excesos, de ya saben quién y sabe muy bien cómo se las gastan los dueños del partido naranja, así que es seguro que le de mucha atención a la queja.