PROFECIA. - ¡Y la profecía se cumplió! Cesar Peña no estaba en acuerdo con el anuncio de los personajes de entrega recepción que, unilateralmente y dolosamente se ordenó difundir desde la alcaldía. En protesta, ejerció el derecho de pataleo y le funciono. Sin embargo, como todo es aprendizaje, ya se dio cuenta que tendrá que ir contra corriente, hasta en los más mínimos detalles, durante los próximos años.

VIDAS. - El acuerdo original era que, Ignacio García fuera quien recibiera la administración entrante, estaba hablado, se aceptó, pero no se digirió y eso de cumplir la palabra empeñada, no es el sello de esta gestión municipal.

NACHO. - Además la propuesta de Cesar se recibió como un dolor de estómago para los que operan y son dueños de la “tiendita” municipal. Por eso, en auto defensa, fraguaron el complot para hacerle pasar un mal momento al presidente electo y al depositario de su confianza.

FUERA. - Se encargaron de dejarlo fuera de la designación de recepción, por lo menos durante unos días en la opinión pública. No aceptan que aquel a quien exhibieron, defenestraron y sacaron por la puerta trasera, ahora regresa por la puerta de enfrente e incluso corre el riesgo de que pueda ser el jefe de alguno de los varios que sobreviraran a la transición trienal.

ACUERDO. - Las pláticas originales, entre el presidente entrante y el saliente, dejaron asentado que a quien quería Peña Valles en la recepción era a Nacho, sin embargo, de la reunión, a la emisión del boletín oficial, no hubo confusión, pero si mala intención, mano negra que le metió ruido al tema al cambiar a Nacho por Liliana Valdez, pero, como se anticipó, el recule llegaría con la semana y así sucedió.

RECULE. - La recomposición del plan original, no se hizo bajo aclaración alguna, menos fe de erratas, simplemente se difundió la fotografía en la que aparecen Alberto Tarín y Nacho García. La duda entonces surgió, ¿Qué no habían dicho que era Liliana? Es pregunta incomoda, para los mandones del municipio no es agradable aceptar precisiones o que les corrijan la plana y menos que se empodere a quien no están dispuestos a respetar, ya se vio.

DESIGNACIONES. - Después de esto, el anuncio de las designaciones siguió conforme al libreto. El mensaje que manda el presidente electo pretende convencer que, la renovación de los cuadros hará una nueva administración, pero, es solo un espejismo, todo ocurre bajo la inspección y aprobación de quien va de salida, no hay otra manera de llegar al gabinete. El mismo Nacho, por no ser santo de la devoción, tuvieron revire y condicionamiento y a regañadientes fue aceptado.

PROPUESTA. - La última de las designaciones anunciadas, fue en el área turística. Se trata de Sandra Carrillo, un perfil que siempre ha sido identificado con el grupo de Alfredo Lozoya, pero que aparentemente había quedado libre al no ser considerada en las regidurías luego de que fuera proyectada a la propuesta edilicia.

DECEPCION. - Tras la designación de los nueve notables del cabildo y sus no menos representativas suplentes naranjas en las que no apareció Sandra, hubo entonces pláticas cercanas de familia, estaba en la mira otro proyecto político que no vieron con desagrado, las calcas de sus vehículos y las invitaciones a departir con Chava Calderón, mostraban la nueva inclinación. No había de Cesar Peña, eran moradas y no pasaban inadvertidas, tanto que fue el propio Lozoya quien tuvo que enderezarles el camino.

PROPUESTA. - Se puede decir que lo de Chava Calderón fue un momento de flaqueza política, ella y su cónyuge siempre han estado cerca de esa administración, aunque ha sido un camino solo de ida, nunca le dieron una oportunidad, porque, en esa tiendita, solo hay un ganador. La mujer emprendedora se quedó con las ganas de organizar la parrillada de la mina la prieta, tenía el plan e incluía para ello grupo musical y un chef para darle más nivel, pero, se quedó en propuesta, no se autorizó. En los proyectos de esta gestión seguramente es que si podrá hacerlo.